20 de diciembre de 2007

Atención, Al-Taïr


La primera vez que miró hacia un lado ella se sorprendió. Luego, por algún motivo, ya no fue lo mismo. Pensó en algunos años atrás, cuando aquel otro había mirado hacia un lado, todo un síntoma de que se había acabado y no había vuelta atrás. Ella caminó como pudo al baño y vomitó ese rechazo que él le lanzaba con la mirada. Esta vez pasó algo así, pero años después y con otro. Ella de todas formas vio que algo se había roto. Y también desvió la mirada, triste. Ahora entendía lo que aquella mujer le había reprochado, aquello de mirar siempre a los lados, escapando de la estática. Miró hacia un lado, desvió la vista y con ella la atención. Jugaría con las mismas reglas de no decir ni reflexionar, demasiados secretos (todos lo sabemos) rompen hasta una roca de amor.

No hay comentarios.: