30 de octubre de 2013

Virtual, Flavia Ricci

"El amor es como el fuego, 
que si no se comunica se apaga".

Giovanni Papini



Virtual corre. Corre, porque cree que si corre pronto escapará de Real. Real tiende su mano, honestamente, realmente, como es: real. Virtual corre y corre y escapa y cierra, le da Apagar a su vida y cree que así, todo queda allí. Real sigue dando vueltas en su cabeza como una posibilidad, Real. Y Virtual no puede escapar ni siquiera desapareciendo de esa virtualidad, porque la red se extiende, tan real, por su vida. Virtual comienza a pensar en Presencial. Y es así donde descubre todos sus miedos: Real sonríe, no es quien se opone a Virtual. Es Virtual, vaya, quien se opone a Presencial, quiere seguir siendo así, Virtual. Tan de sí, tan solitario, tan ajeno, tan desconcertante. Entonces Real mira a Presencial y ambos se alejan de Virtual. Virtual extiende su mano, pero ellos ni siquiera miran atrás: Virtual queda solo, en su terreno, ajeno, dudoso, triste. Y se da cuenta de lo que perdió: Real y Presencial, dos compañías insustituíbles en su vida. Porque Virtual quería sentir y sintió de forma Real. Quería amar y quizás alguna vez amó de forma Presencial. Ahora no. El miedo recubre toda su vida y las dudas se apropian de su mente. Nada de eso interesa a Presencial o a Real, porque su vida es una, la que es y eligen que sea.


21 de octubre de 2013

Donde el corazón te lleve, Susana Tamaro

"Cada vez que te sientas extraviada, confusa, piensa en los árboles, recuerda su manera de crecer. Recuerda que un árbol de gran copa y pocas raíces es derribado por la primera ráfaga de viento, en tanto que un árbol con muchas raíces y poca copa a duras penas deja circular la savia. Raíces y copa han de tener la misma medida, has de estar en las cosas y sobre ellas: sólo así podrás ofrecer sombra y reparo, sólo así al llegar la estación apropiada podrás cubrirte de flores y de frutos. Y luego, cuando ante ti se abran muchos caminos y no sepas cuál recorrer, no te metas en uno cualquiera al azar: siéntate y aguarda. Respira con la confiada profundidad que respiraste el día que viniste al mundo, sin permitir que nada te distraiga: aguarda y aguarda más aun. Quédate quieta, en silencio, y escucha a tu corazón. Y cuando te hable, levántate y ve donde él te lleve".

7 de octubre de 2013

La soledad de los números primos, P. Giordano

En primer curso de la universidad había estudiado ciertos números primos más especiales que el resto, y a los que los matemáticos llaman primos gemelos: son parejas de primos sucesivos, o mejor, casi sucesivos, ya que entre ellos siempre hay un número par que les impide ir realmente unidos, como el 11 y el 13, el 17 y el 19, el 41 y el 43. Si se tiene paciencia y se sigue contando, se descubre que dichas parejas aparecen cada vez con menos frecuencia. Lo que encontramos son números primos aislados, como perdidos en ese espacio silencioso y rítmico hecho de cifras, y uno tiene la angustiosa sensación de que las parejas halladas anteriormente no son sino hechos fortuitos, y que el verdadero destino de los números primos es quedarse solos. Pero cuando, ya cansados de contar, nos disponemos a dejarlo, topamos de pronto con otros dos gemelos estrechamente unidos. Es convencimiento general entre los matemáticos que, por muy atrás que quede la última pareja, siempre acabará apareciendo otra, aunque hasta ese momento nadie pueda predecir dónde.

6 de octubre de 2013

Puzzle, Flavia Ricci

Palabras que caen sobre sonrisas, abrazos sobre miradas
Todo va poniéndose en su lugar poco a poco
Mientras vos vas regresando y yo puedo decir que no,
no más
Vas queriendo llamar mi atención cuando miro hacia otro lado
Corrés, aunque yo vuelvo a caminar
Los cimientos demuestran su fortaleza
responden en el momento justo
No necesito correr
No necesito llamar tu atención
Los cimientos están fuertes
Las piezas que no encontraba
poco a poco van apareciendo
aunque las hayas escondido algún día
se dibujan con claridad
y las palabras caen sobre sonrisas
los abrazos sobre las miradas
los cimientos dispuestos a seguir construyendo
sin grietas
No hay una nómade nocturna esta vez
Es tiempo de volver
es tiempo de encuentros
es octubre.
No hay nada en vos que me interese
No es necesario que te maquilles una vez más.


1 de octubre de 2013

Flecha, Flavia Ricci

"¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño, 
si vosotros seguís el bien" (1 P. 3.13)

Voy quitando el velo poco a poco y entra la justicia a mi vida.
Voy separando de a poco y con cierto temor la verdad de la realidad
Ahora que lo veo todo claro
que casi me quema los ojos la verdad
la que vi enseguida
la que quise ocultar
hasta de mí
para defenderte
para defendernos
incluso en mi contra
voy quitándome poco a poco la flecha venenosa que me clavaste
cuando yo sonreía pensando que esto que era realidad era verdad
y arde
y quema
pero poco a poco
está cicatrizando ...

Vuela el Dragón de Fuego ...